En su camino rumbo a la silla presidencial, AMLO ha ido juntando a los gallos de su corral: aquellos alfiles que, de lograr llegar a la cima, lo acompañarían en sus seis años de gobierno.
Pese a las continuas derrotas electorales que ha encarado el tabasqueño en los últimos 30 años, ciertos nombres han sobrevivido al tiempo y se han vuelto los entrañables del —otra vez— candidato a la Presidencia.
Tres veces candidato, tres veces ha abrazado el sueño de ser presidente. Andrés Manuel López Obrador tiene una larga historia de lo que él llama fraudes electorales, primero en Tabasco por la gubernatura (allá por el 88 y luego en el 94), después por la Presidencia, en 2006 y 2012.
La tradición pejista de nombrar un gabinete antes de asumir el cargo al que aspira inició hace 12 años, cuando los resultados de la contienda presidencial le dieron el triunfo al panista Felipe Calderón por una margen de menos de 0.5 por ciento y El Peje se autonombró “Presidente Legítimo de México”.
Desde entonces, una de las personas que se ha mantenido cerca del tabasqueño es Claudia Sheinbaum.
Licenciada en física, maestra y doctora en ingeniería energética, como presidente legítimo en 2006 AMLO la nombró titular de la “Secretaría de Patrimonio Nacional”. Seis años después la colocó en su gabinete como secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, mientras que ahora en 2018 espera que se convierta en Jefa de Gobierno de la CDMX por Morena.
No es suficiente que ganemos la Ciudad de México, se debe cambiar el régimen de corrupción que impera en el país y eso sólo lo vamos a lograr de una manera. Con @lopezobrador_ en la presidencia. pic.twitter.com/jpjOlEzkP6
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) 17 de diciembre de 2017
Otro de los nombres fuertes es el del ingeniero Javier Jiménez Espriú, siempre como posible secretario de Comunicaciones y Transportes.
Espriú, un hombre que se autodenomina de izquierda, trabajó como subsecretario de Comunicaciones y Desarrollo Tecnológico en el sexenio del priísta Miguel de la Madrid. Después, en el sexenio del “líder de la mafia del poder”, Carlos Salinas de Gortari, fue subdirector comercial de Pemex.
Llegó al equipo de AMLO en 2008, cuando surgió la primera propuesta de reforma energética de Calderón, a la que se opuso públicamente. Entonces Andrés Manuel lo llevó a su equipo, de acuerdo con una entrevista que el ingeniero mecánico electricista dio a SDP Noticias en 2013.
Miguel Torruco también es de los gallos más fuertes del Peje: especialista del sector turístico y dirigente de diversas cámaras de la industria, se perfila por segundo sexenio consecutivo como titular de la Secretaría de Turismo.
María Luisa Albores también es una de las favoritas del aspirante presidencial. Primero la quiso colocar como secretaria de la Reforma Agraria y espera que el próximo año lleve las riendas de Desarrollo Social (Sedesol).
Entre sus indispensables están Bernardo Bátiz, quien fuera propuesto en 2006 como secretario de Justicia y Seguridad y en 2012 como procurador General de la República, y Bertha Elena Luján, quien pudo haber sido secretaria del Trabajo y, más tarde, de “la Honestidad y Combate a la Corrupción”.
Ninguno de los gallos del Peje figura en la propuesta de gabinete actual, pero ocupan puestos clave en el funcionamiento del ahora precandidato a la presidencia.
Dentro de esta rama se ubica también Agustín Ortiz Pinchetti, propuesto tanto para Gobernación como para la Secretaría del Trabajo.